Galileo tuvo que someterse a la autoridad que representaba
Pero su dignidad le hizo murmurar Eppur si muove (y sin embargo, se mueve)
Casi 400 años después, el gobierno popular también condena y niega la verdad.
La degradación democrática a la que estamos asistiendo en la comunidad valenciana es inaceptable. Y ya resulta innecesario enumerar por qué. Responsables políticos acusados e imputados. Utilización partidista de las instituciones públicas. Manipulación de los medios de comunicación. Clientelismo político. Menosprecio al que piensa diferente. Victimismo infantil. Condena pública de quien les cuestiona. Leyes hechas a medida. Opacidad y falta de transparencia en la contratación y en la gestión…
Todos sabemos que el
El pensamiento único de la derecha es agobiante y abrumador, pero, sobre todo, antidemocrático, porque no permite la divergencia, la crítica y la diferencia sin montar su bochornoso numerito. Un complejo entramado de intereses económicos, sociales y políticos está detrás. Pero ahora, todos tenemos la obligación de reparar el juguete roto en que el PP ha convertido la democracia.
Los resultados electorales del PP en las elecciones europeas no le exculpan de todas y cada una de sus responsabilidades políticas, y por supuesto, de las penales si las hubiere. En su borrachera (sic) postelectoral se creen liberados de todo pecado.
Alguien les ha explicado que el parlamento europeo no es un tribunal como la santa Inquisición elegido para absolverlos? Plebiscito? También tenemos que pensar como ellos e interpretar los resultados como mejor les convenga?
Los socialistas valencianos no vamos a consentir los desmanes del PP. Que nadie lo dude. Por dignidad, por honradez, por respeto a nuestro pasado y porque en situaciones más difíciles nos hemos encontrado, seguiremos defendiendo nuestros principios con el entusiasmo de siempre.
El PP ha entrado en éxtasis. Y los que no pensamos como ellos seguro que arderemos en los infiernos.
Pero como diría hoy Galileo, el PP es la verdad y Camps es nuestro guía, y sin embargo, la sombra de la sospecha que se cierne sobre ellos es, cada vez, más alargada.
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